El momento no pudo ser más oportuno: estaba en mi último año de carrera, con varias ofertas de trabajo sobre la mesa y con las dudas lógicas sobre cuál podría ser la mejor elección para mi futuro. Mi Mentor no sólo me ayudó a analizar las cosas desde una perspectiva objetiva e imparcial, sino que respondió a mis preguntas concretas y me dio consejos muy útiles, caso por caso, basándose en sus experiencias pasadas y compartiendo conmigo su visión del mercado.