Cuando me llegó un correo electrónico planteándome la posibilidad de participar en el programa de mentores CYD, no sabía muy bien en qué consistía, pero después de buscar información y escribirles para preguntar mis dudas (recibí las respuestas muy rápidamente), decidí que debía apuntarme a este programa. Fui seleccionado y a día de hoy no me arrepiento, ya que me llevo unas experiencias muy enriquecedoras de parte de mi mentor, perteneciente a la empresa IBM, que desde el primer momento se preocupó por mí y por resolverme todas mis inquietudes. De lo único que me arrepiento es de no haber podido tener más citas debido a problemas de agenda, pero aun así es una experiencia que recomiendo, ya que ayuda mucho a aprender sobre el mundo empresarial y el mundo fuera de la universidad en general.